PARA QUE SE HACEN LAS COSAS

En la pedorrísima mañana dominical que hoy ocupo, que es tangible y real como el hueco de la soledad, me pregunto ciertas cuestiones, ayer, con la mera intención de despejarme acudí, después del trabajo y abluciones al concierto de ARIEL ROT que se celebraba en el recinto ferial, que está bastante alejado de donde moro, lo cierto es que en el concierto me encontré con algunos conocidos que fueron testigos directos de mi incansable ira, no sin razón sobre determinados temas que me abstengo de exponer aquí, por cierto respeto a quien lo leyere, pero siendo este mi blog lo expondré igualmente: para cuando el día del heterosexual y la nula implicación de un pueblo como el mío en eventos de todo tipo, llegué a casa, abatido por el desagravio que supone estar sólo en un concierto, casi sin gente, y me dió por platicar y creo que con motivo sobre la celebración del orgulloso día gay, respeto mucho las tendencias de cada cual,pero creo que haciendo estas historias se están autoexcluyendo, esta es mi opinión. También me dí cuenta de que a golpes vamos haciendonos carrozillas y el etilizante espiritu me afecte cada día más. Y sólo tomé dos minis. Tan sólo nos quedará el onanismo, que a veces también falla. Terminé de leer A SANGRE FRIA, y en breve retomaré los versos de PANERO por partida doble. Esto es un post de domingo en la mañana y está tan desordenado y borroso como yo.