MURIÓ CON UNA CÁMARA EN LA MANO ( SE NOS HA IDO EL TÍO JESS)

Se ha ido como quiso: rodando. Y esto es muy grande. Un hombre que dedicó su vida entera a su gran pasión: el cine. Nos queda su legado. Muchas pelis que siempre nos divertirán. Allá donde esté estará descojonándose de todo, junto a su amada Lina Romay. Sirva este modesto post como homenaje  a su figura y su inmenso legado, así que más vale que no lamentemos mucho por el, alegremonos de que siempre vivirá, como los Grandes. Porque Jess Franco es y será Grande