viernes, diciembre 19, 2008

ESTOY PERRETE


Totalmente perrete.Sin ganas de nada. Descuidando casa, cuerpo y alma. Así me hallo.Perdón pido a la peña que conozco por no subir aquí sus bitácoras y vivencias para que todo el que me sigue tenga la posibilidad de seguirle a él. MEA CULPA. Y meo mal. Toda la culpa es mía. Cuestión de ponerse las pilas. Pero ¿cómo?. El invierno me atora. Ni vivo, ni duermo, ni escribo. Sólo fumo. Y últimamente demasiado. Y sigo siendo más perro que mi Cuquita. Así que se agradecen comentarios animosos. Gracias por meteros en este blog tan perrete como su administrador.

5 comentarios:

Jorge dijo...

Ánimo hombre, que hay que arrimarse a rodas las luces de navidad que te encuentres, aunque sólo sea por el calorcito que desprenden!

Abrazos

Augusta II dijo...

¡Ja, ja, ja!
Son rachas. Tómatelo con naturalidad y calma. Pero, oye, de culpable nada. Ya sé que "mal de muchos consuelo de tontos" es un poco gilipollesco, pero yo tengo 11 cuadros empezados y ninguno acabado. También estoy perruna. Pasará...

Ánimo y besos.

*La Gotera ke no deja dormir* dijo...

hola kebrán!
yo creo ke no debes sentirte mal por no cumplir tareas ke te has propuesto para con los demás...
si esos demás te aprecian, van a preferir ke estés bien, ke te tomes tu tiempo, antes de ke te estreses por cumplir.
hay ke vivir los procesos personales con la dedicacion y conciencia ke merecen...(mi humilde opnion....)
paciencia...todo a su tiempo, aunke a veces creamos ke éste nos pilla...

un abrazo!!!

Aidee dijo...

Tuve anoche fallas técnicas y hoy, faltas morales, pero tu respuesta está aquí http://aidessa.blogspot.com/2008/12/respuesta.html

Anónimo dijo...

¿Estás hecho un perrete? Pues no hagas caso a las mujeres, si es que les haces caso.

A ninguna, que les den a todas.
Tiene que aparecer una de tu estatura almática.

Yo también estoy perro. Huelo por aquí y por allá, intuyo cuando viene alguien y otras cosas que nadie entiende,doy cuatro vueltas
en redondo para tomar postura de dormir y no sólo chupo el hueso duro de la vida, támbién lo sueño.

Soportamos una desdicha canina semejante. Sin embargo, yo no puedo evitar el ser feliz a pesar de que todo parece jugar en mi contra. Será cuestión de raza, carácter, me digo.

Pero me gustaría que tú también seas feliz siempre y fumar juntos, pues soy un cachorro al que quieren enseñar a ladrar, pero no acabo de aprender...Y fumo y fumo y fumo.

Y echo en falta perros como tú por mi barrio.

Anónimo Fernández.